Como padres siempre estamos atentos a lo que hagan nuestros hijos en la escuela, en el barrio o en cualquier lugar a donde concurran. Pensar siempre que pueden ser víctimas de algún tipo de abuso, es agotador y preocupante especialmente, si presentan rasgos diferentes al resto de sus compañeros, como, por ejemplo, ser aplicado en los estudios o tener una personalidad tímida.

Reconocer una agresión, en muchos casos, es difícil, porque el niño o adolescentes se rehúsa a conversar sobre el tema con sus padres o porque creemos que la única señal de un caso de bullying es presentar moretones o heridas en el cuerpo.

Debemos tener en cuenta que la agresión viene de diferentes maneras y no es necesariamente física. Si notas que tu hijo está cambiando su estado de ánimo o no quiere ir a la escuela, tal vez esté sea víctima de acoso. En la siguiente presentación interactiva te mostramos 5 tipos de bullying más comunes para que estés al tanto.